Cosas que ningún niño debe dejar de hacer

30 abril, 2013 Curiosidades, Niños y Adolescentes Comentarios desactivados en Cosas que ningún niño debe dejar de hacer

Dicen que “la infancia pasa como un suspiro” y cuando menos lo imaginamos, los niños se transforman en esos seres humanos más complejos que deciden dejar de hacer ciertas cosas. ¿Por qué no hacer una lista de lo que un niño no debe de perderse de esos años? Por cierto, ¿tú lo hiciste o tienes algunas otras ideas?

– Cantar a solas o acompañado, a todo pulmón y con el público de su elección.

– Saltar encima de la cama… y después jugar una lucha de almohadas

– Hacerse amigo de una persona mayor, contarse historias y compartir secretos y aventuras.

– Organizar una fiesta de té, o dar clases a sus muñecos favoritos.

– Hacerse de su equipo favorito, sin importar el deporte.

– Sembrar, cuidar y ver crecer algo.

– Reirse tan fuerte que la leche o lo que esté tomando, le salga por la nariz.

– Ir de campamento, no importa si es en un bosque, parque, o el jardín de su casa.

– Rodarse por una colina cuesta abajo.

– Ponerse el lipstick de mamá.

– Hacerse un «chipote».

– Volar una cometa.

– Aprender a nadar y quitarse el miedo a meterse al agua.

– Subirse a un árbol y hacerse de un lugar favorito.

– Enterrar a alguien en la arena.

– Jugar con una caja de cartón

– Jugar o descubrir su sombra.

– Rasparse las rodillas.

– Lanzar una piedra al agua y ver cuántas veces rebota sobre la superficie.

– Hacer un ángel de nieve.

– Bailar bajo la lluvia.

– Jugar con lodo.

– Saltar la cuerda, solo o en grupo.

– Cuidar de una mascota.

– Crear su primera obra de arte, sea en papel, lienzo o la pared de su casa.

– Participar en «guerritas» de globos con agua.

– Hacer algo que a sus papás les ponga el pelo de punta.

– Subir a un tobogán… por el tobogán.

– Disfrazarse de su personaje favorito o crearse uno.

– Cortarse el pelo él solo (o a su hermano).

– Lamer la cuchara o espátula de una preparación de pastel… o de cualquier cosa que se esté cocinando.

– Comerse un bicho: a propósito o por accidente.

– Atrapar a un insecto… y dejarlo ir.

– Construir un fuerte, castillo, cueva o casita con el mobiliario de la casa, sábanas y cojines.

– Caerse de la bicicleta, patines, patineta o cualquier vehículo con ruedas.