En un acto
encabezado por el presidente Felipe Calderón el pasado 12 de mayo en
Torreón, Coahuila, el encargado del equipo de sonido instalado en el
evento fue Juan Francisco Villarreal Barragán, hermano de Sergio
Villarreal, El Grande, uno de los narcotraficantes más buscados por
la PGR y la Secretaría de la Defensa.
En esa ocasión ni el Estado Mayor
Presidencial ni el Centro de Investigación y Seguridad Nacional
(Cisen) repararon en la empresa Equipo Audiovisual de La Laguna,
propiedad de Juan Francisco Villarreal Barragán, durante la
inauguración de una planta de la empresa lechera Lala.
Villarreal Barragán es el hermano de
El Grande, un lugarteniente del cártel de los Beltrán Leyva, por
quien el gobierno federal ofrece 30 millones de pesos a quien dé
informes de su paradero. El narcotraficante fue agente de la
Procuraduría General de la República y policía ministerial en
Coahuila.
Juan Francisco dijo que la empresa
lechera contrató sus servicios, por los cuales cobró poco más de 8
mil pesos. Defendió la honestidad de su labor y agregó que trabaja
de manera abierta.
Señaló que no fue requerido ni
investigado por el gobierno federal.
Desde su llegada al poder, el
presidente Calderón declaró de manera frontal la guerra al crimen
organizado y al menos en una ocasión —en 2007— ha dicho que recibió
amenazas de grupos del narcotráfico.
En entrevista, Juan Francisco
Villarreal dijo estar consciente de la situación de su familiar,
pero —aclaró— “nadie escoge a los hermanos”.
Deslindó a su empresa de cualquier
relación o financiamiento proveniente de alguna actividad delictiva.
Explicó que Equipo Audiovisual de La
Laguna se ha abierto su propio mercado de trabajo desde 1992 y desde
esa fecha ha laborado tanto para compañías privadas como para
centros educativos como el Instituto Tecnológico y de Estudios
Superiores de Monterrey.
Además, de acuerdo con el contrato
número 4504003958 firmado en diciembre de 2004, Equipo Audiovisual
de La Laguna prestó también sus servicios para la Suprema Corte de
Justicia de la Nación.
—¿Está consciente de la situación que
vive su hermano?—, se le preguntó a Villarreal Barragán.
—Tengo una vida pública, abierta,
honesta y... pues qué se puede hacer con los hermanos, no se
escogen... los manda Dios.
Dijo que tiene más de cinco años que
no sabe nada de su hermano Sergio. “Lo único que sé de él es por las
revistas o los periódicos”, indicó