LOS COMPLICES DEL
JJ EN EL CASO CABAÑAS
El JJ tiene dos cómplices.
Solicita PGR a Interpol investigar la presencia del agresor en
algunos países
México.-
La noche en que Salvador Cabañas fue herido en la cabeza, José Jorge
Balderas Garza y El Paco compartieron la mesa 7 del Bar-Bar
con Alger Falcón, El Alger, un hombre que guardaba un
objeto duro y cuadrado en el lado derecho de su cintura.
“Es para mi protección”, dijo a los
empleados de seguridad que lo revisaron en la entrada del centro
nocturno y le impidieron el acceso en un primer momento.
“¡Ya pásalo!”, ordenó Carlos Fernando
Cázares, gerente del lugar.
Antes, cuando llegó a bordo de un
automóvil Mercedes Benz, había preguntado por él para que le
permitiera el paso al bar, pues la última vez que estuvo participó
en una riña con otros clientes del lugar.
Alger Falcón se dirigió hacia donde
estaba El JJ, le presentó a una mujer de cabello rubio,
delgada, que vestía una blusa negra; de inmediato pidió que le
sirvieran un whisky. El JJ degustaba un licor de hierbas.
En la planta baja del bar, en
la mesa 81, muy cerca de la puerta, el futbolista bebía con su amigo
Amancio Rojas Fernández y su esposa María Lurgia Alonso. Ese día no
lo acompañaba otro hombre al que los empleados conocen como
El Mala Suerte.
A unos metros de ahí, las cubanas
Diana Hernández, Ismary Carbayo y Anaís Leyva platicaban entre
ellas, bailaron y se quitaron los zapatos.
Llamaron la atención de Balderas
Garza, quien pidió a El Paco que las llevara hasta su mesa.
Una a una las fue subiendo en brazos.
Sólo 30 minutos
Alger Falcón trabajó tiempo atrás en
la empresa Resybar, propiedad de los hermanos Ramón y Simón Charaf,
específicamente en la discoteca La Boom de la zona de
Toreo, como capitán de meseros.
Los empleados que fueron arraigados
por la Procuraduría General de Justicia del DF lo describen como un
hombre de complexión regular, 1.83 metros de estatura, tez blanca,
pelo ondulado negro, frente amplia, cejas pobladas, ojos café, nariz
chata, boca mediana, labios medio gruesos.
La noche del 25 de enero llegó a las
3:00 horas y su estancia apenas duró 30 minutos. Ese día vestía
pantalón de mezclilla y camisa y como seña particular tiene una
cicatriz en la nariz provocada, quizá, por un golpe con la hebilla
de un cinturón.
Nadie de los empleados explica la
actividad que tiene actualmente El Alger, quien luego de
dejar de trabajar se hizo asiduo cliente de los centros nocturnos.
“Pasé mis manos sobre su pecho y al
bajar las manos hacia la cintura en forma de vuelta con mi mano
izquierda sentí algo duro y cuadrado en el lado derecho, se hizo
para atrás para evitar que siguiera revisando.
“Le dije que no podía ingresar. Me
dijo; ‘no hagas pedo, es para mi protección’, luego me ordenaron que
lo dejara pasar”, declaró el elemento de seguridad del Bar-Bar.
Hasta el momento, la PGJDF no ha
establecido el vínculo de Alger Falcón con el agresor del delantero
del Club América.
Tampoco la identidad de Aarón, un
sujeto que arribó al Bar-Bar a las 00:45 horas y ocupó la mesa de
Balderas Garza y que a decir de los empleados es a él a quien apodan
El Contador.
La mesa 7
De los testimonios asentados por el
Ministerio Público que integra la averiguación previa FAO/AOB-4/00147/10-01,
Balderas Garza también es conocido como El Jey Jey.
A más de dos años de ser cliente
frecuente, aún no era considerado VIP, tampoco contaba con
membresía del Bar-Bar, pero las tres veces que en promedio mensual
acudía al establecimiento, generalmente ocupaba la mesa 7.
La noche del domingo permaneció ahí
cuatro horas, su consumo total fue de 16 mil 950 pesos, mientras que
Salvador Cabañas consumió 3 mil 829 pesos.
“El JJ siempre ocupaba las
mesas de arriba del bar, cuando Alger llegó como a las 03:00 horas
fue directamente a la mesa de JJ, tomó una copa de whisky y
le presentó a la mujer güera que iba con él.
“Luego se pasó a la cabina y saludaba
a la gente porque muchos lo conocíamos, Alger se retira como a las
03:40 y se queda El JJ con El Paco”, agrega otra
de las declaraciones.
Cuando El Alger salió no fue
revisado. Ninguno de los testigos sabe si el objeto que ocultaba
entre sus ropas aún lo llevaba.
Después de su salida, las tres
bailarinas cubanas llegaron a la mesa de Balderas Garza, quien las
aduló, les invitó una copa y se ofreció a pagar las fotografías que
les vendían en el centro nocturno.
Con el pretexto de que a una de ellas
la esperaba su novio en la planta baja, dejaron la mesa de El JJ
y siguieron bailando, aunque también advierten en sus testimonios
que coincidieron en la zona de baños.
Además, la primera vez que conocieron
al agresor de Salvador Cabañas fue la noche del 30 de diciembre,
aquella ocasión también “fueron a saludarlo” a petición de un amigo.
Por otra parte, La PGR emitió una
alerta a Interpol para que se investigue en algunos países la
presunta presencia de El JJ, informaron funcionarios de la
dependencia.
Una de esas naciones es Estados
Unidos; sin embargo, las autoridades no quisieron dar a conocer a
qué otra parte del Continente Americano pudo viajar el agresor.
Claves
Ubican a escoltas
• El director Jurídico de los Cuerpos
de Guardias de Seguridad Auxiliar del Estado de México, Marcial
Vargas, confirmó que tres agentes de esa agrupación son investigados
por la PGJDF como posibles escoltas de José Jorge Balderas Garza,
El JJ.
• El comandante Roberto Mancio,
director de la agrupación 41 de la policía auxiliar mexiquense,
aseguró que los escoltas le informaron a Balderas sobre la agresión
a Salvador Cabañas un día después.
• La dependencia local informó que
los tres elementos están ubicados y ya se les han girado varios
requerimientos de colaboración.
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Fuente
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