De acuerdo con las últimas cifras oficiales, se estima que en el mundo hay 7.700 millones de teléfonos celulares, una cifra que sobrepasa la población mundial en casi 300 millones. Para el 2020, se estima que habrá un total de 3,5 millones de smartphones en todo el planeta.
El mercado de los teléfonos inteligentes es uno de los más competitivos. “Samsung ha sido el gran dominador de smartphones el último año. La compañía ha acaparado el 22 % de las ventas totales, seguido de Huawei, que concentra el 16 %. Apple (10 %), y las compañías chinas Xiaomi y OPPO con 9 % cada una, cierran la lista”, expresa la redactora en jefe Luisa Bazán, del portal tecnológico Techspring.
Desde la aparición del primer smartphone en 1992, el IBM Simon Personal Comunicator, estos dispositivos se han posicionado en el mercado como los preferidos por los consumidores. El lanzamiento del primer iPhone en 2007 marcó un antes y después en este creciente mercado. No obstante y pese a los avances, un teléfono antiguo continúa en el primer puesto del más vendido de la historia.
Se trata del Nokia 1100, un modelo que salió a la venta en 2003 y que ha vendido la cifra récord de 250 millones de ejemplares. El modelo fue descontinuado en 2007, aunque para entonces ya se había erigido como el terminal más solicitado por el público. El número de ventas lo han colocado como uno de los dispositivos tecnológicos con mayores cifras respecto de otros de entretenimiento como la Nintendo DS (153,7 millones), la PlayStation 2 (153,7 millones) y el iPod de Apple (100 millones).
De acuerdo con diferentes reportes, el éxito del dispositivo se dio, principalmente, por ser un modelo dirigido al mercado de países en vías de de desarrollo, con prestaciones sencillas y de fácil uso. Además, tenía un bajo precio y seguía la línea de sus antecesores: el 5110, 3210 y 3310. Era la época de oro de los teléfonos con cámara, infrarrojo, color, etc.
Su pantalla monocromática es de 96×65 píxeles y tiene un teclado resistente al polvo, así como una linterna que se activa pulsando la tecla ‘C’. Este clásico teléfono había incorporado el tradicional Snake y herramientas como linterna, cronómetro y calculadora.
El Nokia 1100 ha sido asociado con frecuencia en el mundo del crimen, pues se trata de un teléfono fácilmente de hackear, por lo que muchas personas lo han mal empleado para interceptar SMS enviados desde este aparato. Un efecto de origen en el dispositivo hace que pueda ser reprogramado y usado para otros fines.
Nokia aprovechó el éxito para lanzar otros modelos, como el Nokia 1101 o el 1108, con cambios en la retroiluminación y la adición de un pequeño navegador WAP 1.1. No resulta sorprendente que el segundo terminal más vendido en la historia corresponda a otro Nokia, el modelo 1110, cuyas ventas también rondan los 250 millones de unidades.