Cómo orientarse luego de consultar con el Tarot

El Tarot es una herramienta que puede ayudar a las personas a tomar decisiones en su vida y conocer cómo se sienten con respecto a los diferentes aspectos de su vida. Las sensaciones asociadas a algún ámbito en particular puede dar señales de lo que está por venir y consultarlos con las cartas podría indicar si lo que se siente es por un hecho real que va a ocurrir o solo es un sentimiento sin ninguna utilidad en particular. Claro está, el Tarot es mucho más que las sensaciones del consultante, también toma en cuenta el rumbo de su vida orientada a diferentes caminos. En palabras más simples: una persona que esté buscando trabajo podría preguntar si lo va a conseguir. Dependiendo de lo que haga (y de la suerte que tenga con eso), podría obtenerlo o no.

¿Es posible consultarse uno mismo?

En teoría sí, pero en la práctica no se recomienda en lo absoluto porque la persona va a estar predispuesta y parcializada. Lo que quiere decir que sin darse cuenta, procurará que las cartas muestren el resultado que está deseando. Y siempre está la probabilidad de que pase lo que quiere o no. Apartando el Tarot por un momento, hay miles de actividades de interés que normalmente contribuyen a pasar un buen rato  Bien sea compartir una deliciosa comida o pasar tiempo de calidad con los seres queridos. También es muy bueno que haga clic aquí y vea la página web. En aras de conocer un poco más el contexto que rodea el Tarot, es prudente hacer la acotación que las personas de cualquier religión pueden usarlo para consultarse (también las personas que no profesen ninguna religión). Este tipo de cartas no están asociadas a ningún tipo de creencia en particular. Hasta se podría afirmar que en cierta forma son neutras, debido a que solo transmite información que se interpreta al leer cada naipe.

¿A partir de qué edad se puede solicitar una consulta de Tarot?

Lo más idóneo es que se haga cuando uno ya es adulto, ya que no tiene sentido comentarle a un niño cosas profundas con relación a su vida. Solo una persona ya adulta puede entender aspectos del amor, del trabajo, de su familia, etc. Al mismo tiempo, los niños podrían pensar que se trata de un juego y no es así. Entender lo que diga la o el tarotista requiere cierto raciocinio y experiencia de vida. En este enlace se pueden conseguir algunas reflexiones al respecto. Por último, una recomendación que expresan ciertos expertos del tema es que lo más importante es hacerse responsable de la vida propia y no crearse expectativas de que otra cosa va a arreglar los problemas que uno pueda tener. En otras palabras: ni el Tarot ni ninguna otra cosa tiene más prioridad que la responsabilidad que uno mismo mantiene con su vida. Parte de este conocimiento se conecta con saber que las acciones que uno realiza tienen una consecuencia, la cual suele estar directamente relacionada con lo que se haya hecho.